Con este tótem quiero dejar patente mi amor a la música y al mismo tiempo, hacer un homenaje a los músicos callejeros y mas a los "tunos" de mi época que la noche de los Sábados nos alegraban las veladas.
Que frío pasábamos las jovencitas en los balcones a las doce de la noche cuando oíamos las alegres notas, unas veces mas entonadas que otras, según el grado de alcohol que llevaran en el coleto los tunos,y sus cantos tan pegadizos . Esperábamos que alguno nos brindara una canción un piropo al ritmo de Clavelitos, o, simplemente se pararan debajo del nuestro. Como siempre íbamos con "carabina" no nos ataviamos a pedir nada, solo oíamos ilusionadas por si la canción iba destinada a nuestra persona. Nos acostábamos soñando el el guapo tuno que cantaba con voz más potente que ninguno. Ilusas de nosotras, solo iban en busca de alguna mamá mas lanzada que otra, y les ofrecía entrar en casa, allí les esperaba la "niña" con buenas viandas y vevidas que ellos aprovechaban bien. La "niña" joven casadera, rica, y aveces, fea, que su único fin era entrar por el estomago de algún tuno, y engatusarlo.
Todo tiene una explicación y la mía es hacer un homenaje a los ilusionistas de la noche. Por eso mi tótem se define así Primero hay un búho rey de la noche, posado sobre un ojo a medio abrir, la chica, está de testigo la luna, que da paso a un instrumento floreado por las notas cantarranas y rematan dos pájaros , símbolo de la canción Todo ejecutado en madera de pino melis de una viga de mas de 200 años . Todo respira añoranza de otros tiempos.
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