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Adán y Eva

Esta escultura está realizada en un trozo de madera de las que se usan para las traviesa del tren. Me la regaló mi amiga Elena ( que Dios la tenga en su seno) y cada vez que la miro me acuerdo de los ratos que pasé hablando con ella.
Adán y Eva ha dado mucho juego al arte , cada cual ha interpretado este pasaje bíblico a su manera. Yo lo he situado plácidamente tumbados al sol del paraíso, la madera me daba ese tono dorado-moreno para esa ocasión. Como la madera tiene muchos nudos, estos me han servido para que Eva pudiera posar su mano sobre uno de ellos. 
La verdad es que es una bonita manera de ejecutar un desnudo.

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